Un recién nacido de apenas 25 días se encuentra internado en el Hospital Distrital de Minga Guazú, luchando contra una infección congénita de sífilis y recuperándose de una fractura en la clavícula. El caso está siendo investigado por la fiscala Julia González ante la sospecha de violación del deber de cuidado.
El niño nació el 19 de marzo a las 01:40 en un parto domiciliario y fue trasladado al hospital el 13 de abril por una vecina debido a su delicado estado de salud.
La médica de guardia, Denisse Gill, quien recibió al bebé aproximadamente a las 17:00, activó de inmediato el protocolo correspondiente, dando aviso a las autoridades policiales.
Agentes del Puesto 5 se constituyeron en el lugar y reportaron el hecho como una supuesta violación del deber de cuidado, basándose en la información proporcionada por la vecina que auxilió al infante.
Según los datos preliminares, la misma vecina que brindó detalles sobre el nacimiento del niño, podría haber actuado como partera durante el parto domiciliario.
En cuanto a la fractura de clavícula, no se descarta que pudiera ser una consecuencia de las maniobras realizadas durante un parto sin asistencia profesional adecuada.
El caso ha sido elevado al Ministerio Público y la madre del bebé, una joven de 19 años residente en el Km 14 Monday y que vive en condiciones de pobreza, podría enfrentar cargos por violación del deber de cuidado si se confirma que llevó adelante su embarazo sin control prenatal y dio a luz con una persona sin la preparación médica necesaria.
La fiscala Julia González se encuentra recabando información y realizando las diligencias pertinentes para esclarecer las circunstancias del nacimiento y el estado de salud del bebé, así como para determinar la responsabilidad de la madre y de cualquier otra persona involucrada en el caso.