Una ambulancia del Servicio de Emergencias Médicas Extrahospitalarias (SEME) estuvo a punto de incendiarse luego de completar un traslado de urgencia a Villarrica , lo que puso nuevamente en evidencia la crítica situación del parque vehicular del sistema de salud pública .
El hecho ocurrió entre el Domingo de Ramos y la madrugada del lunes , aunque recién trascendió este martes, según informó Vicente Riveros , vocero del Sindicato de Funcionarios del SEME (Sifusme) .
La ambulancia en cuestión fue enviada a apoyar a otra unidad que sufrió una descompostura en pleno servicio, durante un traslado de un paciente crítico desde Asunción hacia Villarrica. La primera ambulancia tuvo que desviarse al Hospital Nacional de Itauguá cuando el paciente se descompensó debido a fallas eléctricas que afectaron los equipos de monitoreo.
«El monitoreo se apagó por completo, y el paciente se descompensó. Se tuvo que ingresar a urgencias para estabilizarlo», detalló Riveros.
Una segunda unidad acudió a Itauguá para completar el traslado , pero durante el regreso, esa ambulancia también presentó fallas graves que casi provocaron un incendio , lo que dejó fuera de servicio a ambas unidades.
📉 “Todas las ambulancias están así” , denunció el vocero sindical, al señalar que el deterioro de las unidades es generalizado . Según explicó, muchos móviles UTI tienen aire acondicionado dañado , lo que impide traslados en días calurosos, y la falta de mantenimiento es una constante.
Además, Riveros mencionó que hoy se registró un altercado con la administración, luego de que una secretaría del sindicato se acercara a reclamar por la situación.
Finalmente, recordó que debido a la saturación de camas en el área metropolitana , los pacientes deben ser derivados al interior del país, lo que agrava la crisis ante la precariedad del sistema de ambulancias .