Dirección de Aporte Obrero Patronal. Foto: Gentileza.
Dirección de Aporte Obrero Patronal. Foto: Gentileza.
Descripción de la imagen

Una investigación del Instituto de Previsión Social (IPS) y la Fiscalía reveló un esquema de fraude millonario que permitió el cobro indebido de subsidios destinados a trabajadores suspendidos durante la pandemia del COVID-19.

El caso involucra al contador Julio David Ramírez Domínguez, quien inscribió falsamente a decenas de personas como empleados, logrando un perjuicio superior a G. 1.200 millones.

Respecto al mecanismo del fraude, la gerente de Prestaciones Financieras del IPS, Vanessa Cubas, explicó que antes de la pandemia Ramírez declaraba apenas 2 a 3 trabajadores en planilla. Sin embargo, entre abril y mayo de 2020 aumentó súbitamente sus nóminas hasta 60 supuestos empleados.

El sospechoso, de acuerdo con los investigadores, pagó aportes obrero–patronales mínimos (unos G. 110 millones en total), solicitó subsidios por suspensión laboral alegando afectación por la pandemia, y con esto recibió más de G. 1.200 millones, es decir, una “rentabilidad” cercana al 1.000%.

“El señor inscribía a personas, pagaba un pequeño aporte y luego pedía la compensación como si fuera que el contrato había sido suspendido. Es abusivo, fraudulento y un daño institucional para todos los trabajadores y empleadores que cumplen con la ley”, señaló Cubas en entrevista.

El fraude quedó en evidencia cuando, tras levantarse la emergencia sanitaria en 2022, Ramírez redujo nuevamente su nómina a solo seis trabajadores.

Por su parte, la fiscal Teresa Sosa, a cargo del caso, confirmó la imputación de 63 de los 83 inscriptos en la maniobra.

“Estamos ante hechos punibles de estafa y declaración falsa, que prevén penas de 6 meses a 5 años de prisión tanto para el empleador como para los falsos empleados que cedieron sus datos”, indicó.

Según la Fiscalía, los supuestos trabajadores cobraban mensualmente los subsidios, pero la mayor parte del dinero era entregada al empleador.

Más empresas bajo la lupa

El IPS no descarta que existan otras patronales involucradas en esquemas similares, por lo que la Dirección de Riesgos y la asesoría jurídica del instituto abrieron nuevas líneas de investigación.

Cubas advirtió que estos fraudes no solo afectan al fondo de Enfermedad y Maternidad, del que salieron los pagos, sino a toda la masa de aportantes.

“Se perjudica al trabajador honesto que necesita cobertura real. Por eso pedimos a los asegurados verificar periódicamente en la web del IPS que sus empleadores estén declarando correctamente los aportes”, insistió.