Un informe final de la Contraloría General de la República confirmó lo que nuestro medio había denunciado en su momento, una serie de irregularidades que la Gobernación de Caazapá cometió en el proceso licitatorio para la adquisición de la merienda escolar en los periodos 2019-2020. La administración de Pedro “Pipo” Díaz Verón (ANR) pasó por alto varias exigencias con tal de favorecer a empresas amigas que fueron adjudicadas.
En la época la Gobernación adjudicó la provisión de la merienda escolar a las firmas Camica SRL, Distribuidora Paraguay y Alimentos Mimi (Marcos Manuel Ortiz Rodríguez). La primera recibió G. 10.307 millones para proveer leche y banana. La segunda G. 3.280 millones por la entrega de galletitas y la tercera G. 1.777 millones también por la provisión de galletitas.
El informe final de la CGR, tras una auditoría, constató una serie de irregularidades. El documento menciona que la Gobernación fijó un presupuesto de G. 15.298 millones sin basarse en los precios referenciales de los productos adquiridos. Tampoco verificó si las empresas adjudicadas cumplían las especificaciones técnicas.
El gobernador “Pipo” Díaz Verón firmó contrato con las empresas sin que presenten documentos obligatorios y sin saber si estaban en condiciones de cumplir lo firmado. También dispuso el cambio de una adenda del Pliego de Bases y Condiciones sin consultar y tener autorización del Ministerio de Educación y Ciencias. Sin interesar la salud de los niños, la Gobernación tampoco verificó si las leches entregadas estaban o no vencidas.
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