Durante el acto de inauguración, el jefe de Estado destacó el aspecto humano del proyecto, el cual fue diseñado y construido por ITAIPU durante el mandato del expresidente Horacio Cartes, quien también estuvo presente en el evento de la fecha.

«El Barrio San Francisco empieza a recuperar ese corazón que movió la inversión inicial. Vamos a cambiar la forma de manejar la salud mental. Si no hay corazón y amor, el cemento y las varillas no sirven de nada. Queremos que esta sea una causa de todos los paraguayos», manifestó el mandatario.

Por su parte, el director general paraguayo de ITAIPU, Justo Zacarías Irún, enfatizó que para la Entidad es muy satisfactorio colaborar con el Ministerio de Salud en esta iniciativa de gran impacto social. “Algunos residentes prueban por primera vez el aire acondicionado y cuentan con un baño en condiciones dignas, siguiendo las instrucciones del presidente Santiago Peña de priorizar al ser humano», agregó.

A su turno, la ministra de Salud Teresa Barán, dijo que el Centro de Adultos Mayores «San Francisco” no es solo un lugar para vivir, representa un cambio transformador en la atención de la salud mental. Actualmente, se encuentran residiendo en el lugar 68 personas.

“Los residentes tendrán una vida digna, con calidad y calidez, como personas independientes fuera del hospital psiquiátrico”, acotó.

La reconversión del Hospital Psiquiátrico en un centro de urgencias psiquiátricas incluye la creación de dispositivos periféricos como este hogar, donde los pacientes de larga estancia pueden alojarse en condiciones dignas. «Para muchos, significa seguridad; para otros, acogida. Para ellos, este lugar representa ese hogar, esa familia que tanto necesitan», añadió la ministra.

Es importante agregar que la infraestructura abarca 3.715 metros cuadrados (m²) de superficie interior y 2.215 m² de área exterior. El centro cuenta con consultorios de odontología, geriatría, psicología, clínica médica, fisioterapia y laborterapia, además de reservorios de agua potable, rampas y baños adaptados para personas con discapacidad.

El plantel del centro para adultos destacó el enfoque humanizado de la atención en el nuevo recinto. «Le miramos como persona, más que nada, y después miramos los diagnósticos. Es el día a día con ellos que desarrollamos más humanidad. Aquí no importa el grado académico o la preparación, lo fundamental es la empatía y la capacidad de ponerse en el lugar del otro», remarcó el equipo de profesionales.