El policía Víctor Cantero, exnovio y principal sospechoso del feminicidio de María Ramona Cardozo, dio su versión de cómo se habría producido el fallecimiento. Involucró a una segunda persona cuya existencia se desconoce y habló de un “accidente” que él no vio, pero que le contaron.

El hallazgo de restos óseos y de miembros inferiores en la cima del cerro Cristo Rey,  Caacupé, ayer por la tarde, fue posible mediante las indicaciones dadas por el propio Víctor Cantero, quien guió a los investigadores hasta ese lugar, para localizar el cadáver de la mujer que, según él mismo sostiene, es María Ramona Cardozo (37).

Durante el trayecto rumbo a la escena fatal, Cantero mencionó a un tal Isidoro, quien fue testigo de cómo la embarazada cayó de una altura y murió. Este mismo hombre supuestamente avisó a Cantero lo que había sucedido y fue así como el actual principal sospechoso, se enteró del fallecimiento.

Consultado sobre qué hacía su mochila en el cerro y con qué fines había acudido al sitio, el detenido contestó que se dedica a la búsqueda de piedras preciosas, pero que, su bolsón “sufrió un percance”, entonces lo dejó allí y llevó su carga en una bolsa, según relató el fiscal Gedeon Escobar a los medios.

La mayor parte de los restos estaban esparcidos debajo de las malezas y de los troncos, con los cuales, se intentó tapar todo. Se encontraron miembros inferiores, la columna vertebral y la mano. El cuerpo fue quemado en parte.

María Ramona desapareció el 1 de julio y estaba a punto de dar a luz, situación que le generaba mucho entusiasmo, según se observaba en sus fotografías. Esta mañana a las 10:00 se realizará una autopsia para determinar la causa de muerte y para confirmar la identidad.