Según la información proporcionada por la Comisaría 5.ª de Ybaroty, el fallecido fue identificado como Roberto Carlos Armoa González, de 40 años, domiciliado en Borja. El sacerdote había tomado posesión de su cargo en la Parroquia Señor Crucificado de la Buena Esperanza apenas el jueves pasado. Aparentemente, su cuerpo fue hallado colgado dentro de su domicilio.

El hecho fue reportado a través de una llamada telefónica al 911. Al llegar al lugar, la Policía Nacional observó desde el exterior que en el interior de la vivienda se encontraba una persona sin signos vitales, aparentemente suspendida de una viga de metal mediante un cable negro. Según los informes preliminares, sus pies tocaban el suelo en lo que se describe como una suspensión incompleta.

Con la ayuda de vecinos, los agentes policiales forzaron la cerradura del portón de acceso para ingresar a la vivienda. En el lugar se hizo presente el médico forense, Dr. Alfredo Lichi, quien diagnosticó como probable causa de muerte asfixia mecánica por ahorcamiento, sin encontrar otras lesiones en el cuerpo.

El Ministerio Público anunció que se revisarán las grabaciones de las cámaras de seguridad en la zona para esclarecer los hechos. También se investigará si la escena corresponde a un simulacro, ya que no se descarta la posibilidad de que se trate de un asesinato.